El pasado 3 de julio el Gobierno de Gandia formado por PSOE y Compromís, decidió unilateralmente y sin contar con la opinión de vecinos y comerciantes de la playa de Gandia, cambiar 360 plazas de aparcamiento gratuito en la zona del Clot de la Mota y hacerlo de pago.
La conocida Zona Azul, aunque en este caso se decidió pintar de Rosa, supongo que debió ser por aquello de tener una ciudad inclusiva y que los parkings de pago también sean vistos desde una perspectiva feminista.
Nuevamente se han equivocado no solo el fondo, que supone más coste para el ciudadano, sino también en las formas con las que aplicaron esta injusta medida, haciéndolo con nocturnidad, sin previo aviso y a espaldas de la ciudadanía.
Como ya ocurriera con la implantación de La Morada en la primera línea de la playa y en el paseo Germanías, el Gobierno PSOE y Compromís, vuelve a hablar de consenso con la hostelería cuando no hay más que visitar y escuchar a los propietarios de bares, cafeterías y restaurantes de la zona para conocer su disconformidad con esta decisión.
La medida se debe única y exclusivamente a la mala gestión del Gobierno de Gandia, como dice textualmente en la modificación del contrato que se realizó en junio de 2021:
“Por la existencia de un número de plazas de Zona Azul inferior al inicialmente previsto en el anteproyecto de explotación”.
Ya que previo a la campaña electoral de 2019, ante el gran descontento y enfado de los ciudadanos, se hicieron constantes modificaciones de la Zona Azul que afectaron a calles y número de plazas de aparcamiento por lo que era evidente que la empresa salía perdiendo. Eso no le importó al PSOE que, ante esta situación, decidió hacer las modificaciones que le vino en gana para intentar contentar a unos vecinos de los que ansiaba sus votos. Lo peor de ello es que al final y como siempre, es el ciudadano el que acaba pagando la factura y los desmanes, los antojos y los desatinos a los que nos tiene acostumbrados la izquierda con aquello de “yo hago y los demás pagan”.
Pero no solo amplían en 360 zonas de aparcamiento de pago, sino que además es mucho más caro. Mientras que la tarifa del servicio de la Zona Azul en casco urbano es de 0’50 €/hora, en la playa de Gandia la nueva Zona Rosa cuesta 1’15 €/hora.
Y para colmo, el Gobierno afirma no entender la polémica generada por su decisión. Seguro que saldrían de dudas si pisaran más la calle, hablaran con los ciudadanos, los turistas, los hosteleros, con los trabajadores, y con todos esos autónomos que abren las persianas de sus negocios todos los días y que y, de por sí , están saturados de impuestos. Sumemos ahora un gasto más por aparcar en la vía pública.
Vicent Gregori Acosta
